Prepara masa de pizza casera al auténtico estilo napolitano

¿Sabías que en 2017 la Unesco declaró la pizza napolitana y el arte de su preparación como parte del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad? Y es que no hay nada mejor que sucumbir a los placeres de degustar una deliciosa masa de pizza casera al estilo napolitano, finita en el centro y con su característico borde más grueso y esponjoso. Simplemente sublime.

Si te decimos que vamos a darte la mejor receta de masa de pizza casera, con un detallado paso a paso, y que además conocerás los trucos mejor guardados para preparar la pizza en casa como si fueras un auténtico pizzaiolo… ¿te unes al plan?

Para saber cómo hacer una masa de pizza como la preparan los napolitanos primero debes conocer qué elementos característicos debe tener sí o sí para ser considerada como tal.

Este es el decálogo de la Associazione Verace Pizza Napoletana (APV), una asociación italiana que, desde 1984, promueve y protege la marca “verdadera pizza napolitana” por todo el mundo:

Está hecha a mano (sólo se permite usar un robot de cocina para la masa) y, como todo lo handmade, no existirán dos pizzas napolitanas iguales.

La receta de una auténtica massa de pizza napoletana sólo lleva 4 ingredientes: agua, sal, levadura y harina. Y debe dejarse leudar un mínimo de 8 horas para conseguir esa textura inmejorable. 

¿A que nunca imaginarías un pizzaiolo usando una máquina para trabajar la masa? Pues eso, a la hora de manipular y extender la masa, siempre deberá hacerse con las manos, ya que es así como conseguimos desplazar el aire desde el centro hasta el exterior para que la masa de la pizza quede más hinchada en los bordes. Ni se te ocurra usar el rodillo.

Una auténtica pizza napolitana llevará estos ingredientes, que serán preferiblemente originarios de la región italiana de Campania:

• Tomate natural para la base, pelado y triturado a mano, que no quede demasiado denso pero que conserve algún trozo de tomate.
• Tomates frescos esparcidos y cortados en gajos.
• Mozzarella de búfala (en rodajas) o bien fior di latte (en tiras), distribuida uniformemente.
• Queso rallado que, en caso de utilizarse, debe esparcirse en movimiento circular.
• Hojas de albahaca frescas.
• Aceite de oliva virgen extra sobre los condimentos, vertido sobre la pizza haciendo un movimiento en espiral.

La pizza napolitana tradicional más ortodoxa solo puede llevar las salsas marinera (marinara, con tomate, ajo, orégano y aceite de oliva) o margarita (margherita, con tomate, mozzarella/fior di latte, albahaca y aceite de oliva), aunque también se admiten otras variaciones con ingredientes al gusto: cuatro estaciones, caprichosa, cuatro quesos,… ¡salivando estamos!

Para conseguir esa masa de pizza esponjosa que tanto nos gusta, la cocción de una auténtica pizza napolitana tradicional debe hacerse sobre la superficie de un horno de leña durante no más de 90 segundos.

Si bien en casa los hornos domésticos no alcanzan las temperaturas de los hornos de leña (alrededor de los 450ºC), una buena opción para hornear la pizza en casa sin perder el toque auténtico es precalentar el horno al máximo (250-260ºC) unos 20 minutos, calor superior e inferior, y utilizar una piedra refractaria para pizza, que te ayudará a recrear el horno de la pizzería italiana en tu cocina. Una vez caliente, introduciremos la bandeja y/o piedra en la parte superior con la pizza y la hornearemos unos 5-6 minutos.

Los pizzaioli de verdad no fallan en la cocción, dando como resultado una pizza de bordes gruesos (1-2 cm), crujientes por fuera, esponjosos y blanditos por dentro, con una base fina que sea fácilmente plegable sobre sí misma. Sabremos que hemos acertado con el punto de cocción si la masa de la pizza está dorada (nunca quemada) y con esas características motitas oscuras como de piel de leopardo.

Para que los fanáticos de la pizza napolitana la consideren como tal, ésta debe ser redonda, con un diámetro no superior a 35 cm, con un borde grueso y una parte central más fina (máximo 4 mm).

Los ingredientes que, si aún no te has fijado, coinciden con los colores de la bandera italiana (el verde de la albahaca o el orégano, el blanco de la mozzarella o el ajo y el rojo del tomate), deben destacar en el centro de la pizza.

Una pizza recién horneada es un festival de aromas: la masa de pizza ya hecha desprende un olorcito a pan delicioso, la mozzarella y el tomate le dan un toque ácido, el ajo y la albahaca aportan ese punto especiado tan inspirador…

Lo mismo sucede con los sabores, que van mezclándose entre ellos dando pie a un sabor intenso inconfundible: la masa de la pizza napolitana se funde con la acidez del tomate, el sabor salado de la mozzarella, la frescura de la albahaca… ¡una auténtica explosión de matices para el paladar!

La APV también define en su decálogo el valor energético que debería tener la pizza napolitana, considerada un símbolo de la dieta mediterránea:

·       Marinera: 550 kcal (con un pan de 250 g)

·       Margarita: 800 kcal (con un pan de 250 g)

Ahora que ya sabes lo que deberás cumplir para que tu pizza casera sea al más puro estilo napolitano, te damos la receta definitiva de la masa de pizza para que puedas disfrutarla en casa.

Para la masa de pizza napolitana:

• Agua a temperatura ambiente (320 g)
• Harina de fuerza o de tipo “00” (500 g)
• Levadura fresca de panadería (0,75g)
• Sal (10 g)

Aunque la receta tradicional no lleva más ingredientes que éstos, para prepararla en casa y quede bien, algunos expertos recomiendan añadirle a la masa:

• Azúcar (5 g), para lograr esa característica coloración que sólo le da el horno de leña.
• Aceite de oliva virgen extra (20 g), para aumentar la humedad de la pizza en una cocción que deberá ser más larga que si se hiciera en un horno de leña.

Para los condimentos, si quieres ser fiel a la pizza napolitana tradicional:

• Marinera: tomate fresco, ajo, orégano y AOVE.
• Margarita: tomate fresco, mozzarella de búfala/fior di latte, hojas de albahaca y AOVE.

Y también puedes dar rienda suelta a la creatividad y dejarte llevar por tus propias preferencias: anchoas, alcaparras, cebolla, jamón, beicon, alcachofas, sobrasada, aceitunas, berenjenas, calabacín, maíz, queso azul… ¡a tu gusto!

• Un cuenco o bol de cristal grande
• 3 cuencos más pequeños
• Una espátula
• Film transparente
• Un paño de cocina limpio
• Papel de hornear
• Piedra refractaria para el horno
• Una rasqueta o cortador para la masa
• Una báscula de cocina

1. Pon la harina en un cuenco de cristal grande y forma un agujero en medio, como si fuese un volcán.
2. Vierte el agua en el agujero que has dejado y pon el azúcar y la levadura. Con la ayuda de una cuchara, diluye la levadura en el agua. Mezcla bien.
3. Añade la sal y forma una masa uniforme.
4. Es momento de sacar la masa del cuenco y amasarla bien, durante unos 10-15 minutos, sobre una superficie plana. Si en algún momento se te pega la masa en las manos, espolvorea con una pizca de harina. Solo con tiempo de amasado y paciencia conseguiremos una masa de pizza elástica y perfecta.
5. Forma una bola lisa y uniforme con la masa, tápala con un paño limpio (o con el mismo cuenco invertido) y déjala reposar unos 30 minutos.
6. Haz 3 partes con la masa, de unos 250 gr cada una (pésalas en la báscula).
7. Bolea cada una de las partes, es decir, forma 3 bolas lisas y uniformes, como cuando jugabas de peque con la plastilina.
8. Engrasa cada uno de los cuencos pequeños con un poco de aceite e introduce cada bola en su respectivo cuenco. Tapa cada cuenco con film transparente.
9. Tapa con un paño de cocina los 3 cuencos con la masa y deja leudar a temperatura ambiente un mínimo de 8 horas. Es importante dejarla reposar en un lugar sin corrientes de aire ni contrastes térmicos.
10. Pasado el tiempo de fermentación, coge uno de los cuencos con la masa ya leudada y estírala bien, por ambos lados, desde el centro hasta el exterior marcando ligeramente los bordes. Siempre con las manos.
11. Es momento de precalentar el horno, a máxima potencia, con la piedra para hornear dentro. Mientras el horno se calienta, añade los ingredientes que hayas decidido ponerle a la masa de tu pizza napolitana.
12. Asegúrate de que el horno y la piedra refractaria estén muy calientes e introduce la pizza en la parte superior. Hornea durante 5-6 minutos a máxima potencia, hasta que veas que la pizza está doradita y con esos puntitos negros tan característicos.
13. ¡A comer!

Te dejamos con un vídeo explicativo donde podrás ver cómo hacer masa de pizza al estilo napolitano de una forma fácil en casa:

¡Por supuesto! De hecho, cuando dividimos la masa en 3 partes, sólo utilizamos una de ellas, por lo que podemos congelar las otras dos en una bolsa hermética, anotando la fecha de congelación. Te gustará tanto la receta de masa de pizza casera que te proponemos, que seguro que no te durará mucho tiempo en el congelador. ¡Volará!

En Aldi somos muy fans de la pizza casera. Por eso en nuestros supermercados encontrarás todos los ingredientes y utensilios para poder hacerla como un verdadero chef italiano.

Y si por lo que sea, te da pereza meterte en la cocina o no dispones de mucho tiempo, también tenemos nuestras propias masas de pizza Mamma Mancini, elaboradas con ingredientes naturales y aceite de oliva virgen extra. Además, también tenemos un súper kit pizzero, con masa de pizza y salsa de tomate ya preparada, listo para hornear. Las masas y las pizzas de Aldi están entre los productos preferidos de nuestros clientes… ¡Por algo será!