5 tips para cuidar y proteger tus ojos del sol

En verano solemos protegernos la piel ante la exposición solar. Sin embargo, pocas personas tienen en cuenta las mismas precauciones en relación a los ojos. Si no eres una de ellas, este post es para ti. Porque, según datos de la Universidad de California (UCLA), las patologías oculares y visuales incrementan un 25% durante la época estival. El sol, el cloro y el agua salada son los causantes de afecciones en los ojos que pueden llegar a ser graves e incluso irreversibles. 

En ALDI queremos que tomes consciencia y pongas en práctica nuestros consejos para cuidar y proteger tus ojos, así como los de las personas más vulnerables. Aprender es de sabios. ¿Empezamos?

Cuidar la vista, especialmente durante los meses de verano, es algo obligatorio. Y es que una exposición solar excesiva daña sí o sí nuestros ojos, ya sea en forma de irritación ocular, enrojecimiento, sequedad, visión borrosa u otras patologías de mayor gravedad que causan el deterioro de la visión central del ojo, tal y como afirma el doctor Nabil Ragaei Kamel del Hospital QuirónSalud.

Ahora que ya conoces los riesgos de no cuidar la salud de tus ojos, te contamos todo lo que tienes que saber para que las vacaciones no te pasen factura. ¡Sigue nuestros tips! 

Según el Instituto Clínico Quirúrgico de Oftalmología, usar gafas de sol en verano (incluso en los días nublados) es vital para evitar los rayos solares que actúan incluso con nubes. Son el mejor sistema para proteger los ojos del sol, puesto que ejercen de barrera y previenen la aparición de enfermedades.

¿Qué debes saber sobre gafas de sol? Hazte con unas homologadas. Para evitar lesiones, el cristal debe ser testado por una autoridad sanitaria y contar con los filtros adecuados contra las radiaciones infrarrojas (IR) y ultravioleta (UV). Asegúrate de ello para proteger tus ojos del sol con garantías.

Es básico para cuidar tus ojos, sobre todo, durante los meses de verano. Te aconsejamos que lo hagas a diario, para hidratarlos en profundidad, con gotas o lágrimas artificiales que ayuden a limpiar la superficie ocular y a reducir la concentración de alérgenos y partículas. ¿Tu misión prioritaria? Evitar la sequedad. Lo conseguirás.

El cloro y el salitre son grandes enemigos de la salud ocular. Los ojos se irritan y enrojecen e incluso nos llegan a picar. Por esta razón, debes usar gafas cuando nades (y más si te encanta bucear) y darte una ducha después de bañarte en la playa o en la piscina. Esta será la mejor manera de proteger la zona ocular. Además, si llevas lentillas debes saber que éstas absorben todos los agentes externos. Así pues, ten precaución con el cloro y los productos antialgas, ya que pueden producir conjuntivitis e infecciones.

Si el aire acondicionado acostumbra a convertirse en tu bestfriend durante el verano, haz un uso responsable de él. No solo para cuidar el medioambiente, también para proteger la salud de tus ojos. Y es que reseca mucho el ambiente y, por ende, da lugar a la molesta sequedad ocular. Importante: evita por todo lo alto el flujo directo, además de humidificar el ambiente y regular la temperatura. 

#ALDIconsejo: cuando viajes en avión ten en cuenta que el aire acondicionado funciona a toda pastilla. Por ese motivo, notarás una gran sequedad ambiental. Protégete como es debido e hidrátate los ojos de forma preventiva con lágrimas artificiales. Ahora sí, ¡a volar!

Hay medidas de higiene ocular que deberías poner en práctica cuanto antes. Por ejemplo, no compartas tu toalla. ¿El motivo? Porque puede convertirse en vía de contagio directa de algunas infecciones oculares. 

Además, es muy importante que no te toques los ojos con las manos. Sabemos que muchas veces es misión imposible, pero son transmisoras de polvo y partículas que pueden dañar tus ojos. Asimismo, aplícate el protector solar adecuado con mucho cuidado, evitando que entre en los ojos.

#ALDIconsejo: cuando esparzas la crema, hazlo uniformemente, así impedirás que el sudor conduzca restos del protector y te irrite los ojos constantemente. Fun-da-men-tal. 

¿Sabías que los ojos de los más pequeños son mucho más sensibles que su piel? ¿Y que el 98% no usa gafas de sol, aunque se tiren horas y horas jugando en el exterior? Además de ponerles crema a menudo, hay que tomar conciencia y proteger sus ojos frente a los rayos nocivos del sol. 

Te ayudamos con los siguientes datos, facilitados por el Col·legi Oficial d’Òptics Optometristes de Catalunya (COOOC): el cristalino de los bebés deja pasar hasta el 90% de la radiación UVA y el 50% del UVB. Si no protegemos el ojo como es debido, estos rayos llegan directamente a la retina. Cuando la criatura tiene 12 años, estos porcentajes se sitúan entre el 60% y el 25%, respectivamente. Sin la protección apropiada, el 80% de la radiación solar acumulada en la vista tiene lugar antes de los 18 años.

#ALDIconsejo: es esencial que tu peque use gafas solares homologadas. Te recomendamos que la montura sea de plástico, porque son mucho más resistentes, cómodas e incluso más económicas. Tampoco dejes de utilizar complementos que protegen de los rayos solares, como una gorra. Y aplicar crema solar a conciencia, entre otras medidas preventivas. Protégele.

>> No olvides proteger tus ojos cuando vayas a la nieve y ponte las gafas de sol porque cuidan de tu salud ocular y disminuyen el efecto de deslumbramiento. No te las olvides cuando hagas la maleta.

Fuentes:

QuirónSalud

Col·legi Oficial d’Òptics Optometristes de Catalunya